Antoine De Saint-Exúpery (fragmentos)
''Habrá de perdonárseme. Mi amigo jamás daba explicaciones. Quizá me creía semejante a él. Pero yo, desgraciadamente, no sé ver corderos a través de las cajas. Soy quizá un poco como las personas grandes. Debo de haber envejecido."
"pero sobre tu pequeño planeta te bastaba mover tu silla algunos pasas. Y contemplabas el crepúsculo cada vez que lo querías.
Un día vi ponerse el sol cuarenta y tres veces.
Y poco después agregaste:
¿Sabes?... Cuando uno está verdaderamente triste son agradables las puestas de sol...
-¿estabas, pues, verdaderamente triste el día de las cuarenta y tres veces?
el principito no respondió."
"-Si un cordero come arbustos, ¿come también flores?
-un cordero come todo lo que encuentra.
-¿hasta las flores que tienen espinas?
-Si. hasta las flores que tienen espinas.
-Entonces, las espinas, ¿para qué sirven?."
"Las espinas no sirven para nada! Son pura maldad de las flores!"
"Después de un silencio me largó, con cierto rencor:
-¡No te creo! las flores son débiles. Son ingenuas. Se defienden como pueden. Se creen terribles con sus espinas."
"-Conozco un planeta donde hay un señor carmesí. Jamás ha aspirado una flor. Jamás ha mirado a una estrella. Jamás ha querido a nadie. No ha echo más que sumas y restas. Y todo el día repite como tú: "¡Soy un hombre serio! ¡Soy un hombre serio!" Se infla de orgullo. Pero no es un hombre: ¡es un hongo!."
"¿Y no es importante que yo conozca una flor única en el mundo, que no existe en ninguna parte, salvo en mi planeta, y que un corderito puede aniquilar una mañana, así, de un solo golpe, sin darse cuenta de lo que hace? Esto, no es importante?"
"Si alguien ama a una flor de la que no existe más que un ejemplar entre los millones y millones de estrellas, es bastante para que sea feliz cuando mira a las estrellas. Se dice: "Mi flor está allí, en alguna parte..." Y si el cordero come la flor, para mí es como si, bruscamente, todas las estrellas se apagaran. Y esto, ¿no es importante?"
"es preciso que soporte dos o tres orugas si quiero conocer a las mariposas, ¡Parece que es tan hermoso! si no, ¿quién habrá de visitarme? tú estarás lejos. En cuanto a los animales grandes, no les temo. Tengo mis garras" (dijo la flor)
"Hay que exigir a cada uno lo que cada uno puede hacer -replicó el rey- La autoridad reposa, en primer término, sobre la razón. Si ordenas a tu pueblo que vaya a arrojarse al mar, hará una revolución. Tengo derecho de exigir obediencia porque mis órdenes son razonables."
"Mi flor es efímera, se dijo el principito, ¡y sólo tiene cuatro espinas para defenserse contra el mundo! ¡y la he dejado totalmente sola en mi casa!"
"Los hombres ocupan muy poco lugar en la Tierra. Si los dos mil millones de habitantes que pueblan la Tierra se tuviesen de pie y un poco apretados, como en un mitín, podrían alojarse fácilmente en una plaza pública de veinte millas de largo por veinte millas de ancho. Podría aislarse a la humanidad sobre la más mínima islita del Pacífico."
"Las personas grandes, sin duda, no os creerán. Se imaginan que ocupan mucho lugar. Se sienten importantes como los baobabs. Les aconsejaréis, pues, que hagan el cálculo. Les agradará porque adoran las cifras. Pero no perdáis el tiempo en esta penitencia."
"¿qué significa "domesticar"?
-es una cosa demasiado olvidada -dijo el zorro-, significa "crear lazos".
-¿crear lazos?
-sí, -dijo el zorro-. Para mí no eres todabía más que un muchachito semejante a mil muchachitos. Y no te necesito. Y tú tampoco me necesitas. No soy para tí más que un zorro semejante a cien mil zorros. pero, si me domesticas, tendremos necesidad el uno del otro. Serás para mí único en el mundo. Seré para tí único en el mundo..."
"Pero el zorro volvió a su idea: Mi vida es monótona. Cazo gallinas, los hombres me cazan. Todas las gallinas se parecen y todos los hombres se parecen. Me aburro, pues, un poco. Pero, si me domesticas, mi vida se llenará de sol. Conoceré un ruido de pasos que será diferente de todos los otros. Los otros pasos me hacen esconder bajo la tierra. El tuyo me llamará fuera de la madriguera, como una música. Y además, ¡mira! ¿ves allá, los campos de trigo? Yo no como pan. Para mí el trigo es inútil. Los campos de trigo no me recuerdan nada ¡es bien triste! pero tú tienes cabellos color de oro. Cuando me hayas domesticado, será maravilloso! El trigo dorado será un recuerdo de tí. Y amaré el ruido del viento en el trigo...El zorro calló y miró largo tiempo al principito,-¡POR FAVOR.. DOMESTÍCAME!.""Sólo se conocen las cosas que se domestican -dijo el zorro-. Los hombres ya no tienen tiempo de conocer nada. Compran cosas hechas a los mercaderes. Pero como no existen mercaderes de amigos, los hombres ya no tienen amigos. Si quieres un amigo ¡domestícame!.-¿qué hay que hacer? -dijo el principito-Hay que ser muy paciente -respondió el zorro-. Te sentarás al principio un poco lejos de mí, así en la hierba. te miraré de reojo y no dirás nada. La palabra es fuente de malentendidos. Pero, cada día podrás sentarte un poco más cerca.""Los ritos son necesarios
-¿qué es un rito? -dijo el principito-
Es también algo demasiado olvidado -dijo el zorro-. Es lo que hace que un día sea diferente de los otros días; una hora, de las otras horas..."
"He aquí mi secreto. Es muy simple: no se ve bien sino con el corazón. Lo esencial es invisible a los ojos.""-¿también tú tienes sed? -le pregunté-
Pero no respondió a mi pregunta, me dijo simplemente:
-El agua puede ser también buena para el corazón."
"Los ojos están ciegos. Es necesario buscar con el corazón."
"Pero yo no estaba tranquilo. Me acordaba del zorro. Si uno se deja domesticar, corre el riesgo de llorar un poco...""Y cuando te hayas consolado (siempre se encuentra consuelo) estarás contento de haberme conocido. Serás siempre mi amigo. Tendrás deseos de reír conmigo. Y abrirás a veces tu ventana, así... por placer... Y tus amigos se asombrarán al verte reír mirando al cielo. Entonces les dirás "Sí, las estrellas siempre me hacen reír", y ellos te creerán loco."
"Será como si te hubiera dado en lugar de estrellas un montón de cascabelitos que saben reír..."
Podemos tomarlo como un simple cuento para niños, o como unametáfora de la vida misma.Todos somos a veces el zorro, a veces la flor, en ocaciones el cordero, porqué no el principito.. somos el humano, y tenemos nuestro planeta, y nuestros crepúsculos. Todos tenemos nuestros cascabelitos que saben reír...